Lautaro
Teruel se encuentra condenado a 12 años de prisión por abuso sexual. Sin
embargo, en junio del 2022 se le otorgó un permiso para permanecer en una
clínica ante una infección por una uña encarnada, dónde estuvo alrededor de 3
meses. Luego volvió al penal de Villa Las Rosas pero hace dos días el juez
Martín Pérez le otorgó el beneficio de la prisión domiciliaria.
Liza Medrano, abogada de una de las víctimas de Teruel, informó que la condena aún no está firme, pero desde el momento en que se dispuso la pena se dictaminó su traslado al establecimiento carcelario.
"Desde que se dictó la pena, con total derecho porque lo prevé el código, la defensa ha interpuesto distintas vías recursivas para poder obtener nuevamente la prisión domiciliaria lo que fue denegado por el tribunal de juicio y por el tribunal de impugnación, y no se hizo lugar tampoco por la Corte de Justicia lo que justificó después que el defensor interpusiera un recurso extraordinario federal el cual yo contesté", explicó.
Los argumentos para el recurso federal fueron "vulneración de garantías constitucionales" de acuerdo a la visión particular del defensor, Juan Casabella Dávalos.
Sobre la prisión domiciliaria, señaló que se enteró por los medios de comunicación y que, hasta el momento, no pudo acceder a los fundamentos del beneficio.
"Me imagino que al haberse concedido esto irán todos los presos a pedir lo mismo. En eso consiste el derecho, si hay una jurisprudencia, pueden acceder a la fundamentación para ver si encuadra en el mismo caso para obtener el beneficio", dijo.
Además, la letrada señaló que la prisión domiciliaria se otorgó tras la presentación de un habeas corpus de la cual no se la hizo parte, por ende, lo desconocían.
Medrano remarcó que le preocupa el peligro de fuga, entendiendo que tiene las posibilidades de burlar el sistema electrónico con el que se encuentra monitoreado y que espera conocer los fundamentos para que vuelva a cumplir su prisión preventiva en la unidad carcelaria hasta que la condena quede firme.
La abogada recordó, además, que las víctimas de Teruel sufrieron los abusos dentro de la vivienda donde hoy cumple su prisión preventiva.
También señaló que todas las intervenciones y recursos que se presenten generan costas para las víctimas aunque en el caso particular no sucede por ser defensora oficial.
"Todo esto fue muy tortuoso para mí representada. Al principio era menor de edad, después cumplió la mayoría, pero afrontar el debate es un proceso que realmente lesiona mucho. Tener que volver a contar todo es bastante agotador y más cuando viene con dolencias de mucho tiempo. Esto no es teórico, yo lo vivo día a día", indicó y agregó que existía una angustia al pensar en que la Justicia podía no llegar a creer en el relato de la víctima, profundizada en el hecho de que el acusado y su familia son personas públicas.
Cómo defensora oficial informó que hoy tiene más de 3 mil expedientes, pero en la mayoría de los casos la víctima no busca iniciar un proceso hasta que se logra una contención. En verano, señaló, es la época con mayor radicación de denuncias por abuso sexual, y con mayor porcentaje en el ámbito intrafamiliar.
Fuente: Algo Personal - FM Noticias 88.1 MHz
LS
