DDN. Tras una denuncia realizada por el vicepresidente de la Federación de Centros Vecinales, Walter Igne, el presidente de la misma desmintió las acusaciones y explicó la situación.
“Hay que contar la verdad completa de cómo es todo y no decir algo que es, para que después se pueda desprestigiar a la institución y al bingo después de tanto trabajo. El que conoció la federación, cuando llegamos en 2014 era un nido de palomas y de ratas. Hoy tenés cielo raso, aire acondicionado, salón nuevo arriba, oficinas, un pre jardín y un montón de cosas se hicieron. Se arregló la fachada y hay 120 obras en toda la provincia”, expresó Gutiérrez.
El presidente de la Federación de Centros Vecinales informó que el bingo se realizó seis veces, el primero con 40 mil cartones y el último con 120 mil cartones. Aproximadamente, la venta fue entre 70 o 80% sobre la totalidad de cartones emitidos.
“Hay un montón de gastos dentro del bingo. La promoción, la propaganda, la emisión de los cartones también se paga. Esto sale de la propia venta del bingo, se paga a posterior”, explicó. El 40% de la ganancia del bingo queda para el ente emisor.
Gutiérrez manifestó que, tras este último bingo, que fue realizo en abril, la Federación de Centros Vecinales recaudó 5 millones 700 mil pesos. “Eso dejó de ganancia el bingo. Lo que el señor dice (Igne) es que son 3 millones, una cifra así tiró, y eso es a la fecha. El bingo fue en abril, después se fueron sacando de acuerdo a algunas obras que venimos haciendo, obviamente que tiene que haber movimiento y tiene que bajar el recurso. Está todo bancarizado”, dijo.
“Autorizamos que vengan contadores y hagan una auditoría externa para tener la certificación de que todo está en un proceso normal. Él decía que faltaba dinero, que se quedaron, y también escuché que yo me quedé con 8 millones de pesos. Voy haciendo tres convenios, tres planes de pago, dentro de la Universidad Católica para que mi hija se pueda recibir, ¿me entienden?”, manifestó.
Gutierrez relató que la situación inició a comienzos de octubre, cuando Igne llegó a la Federación y pidió ayuda por un problema de su hijo, presuntamente relacionado al narcotráfico. “Él hace una denuncia, el sábado, dando nombres de las personas que supuestamente vendían. Desde ahí, se empezó a perseguir que lo quieren matar, como contó, pero ahora me responsabilizó a mi cuando yo fui el que lo acompañó”, dijo.
“Un domingo después del superclásico lo llevó hasta su casa y cuando me vuelvo me llama de nuevo para que vaya. Voy y me dice que lo querían matar. Le pregunté qué quería hacer y me dice que lo lleve a Castañares a hacer la denuncia, lo llevé y lo esperé hasta las 2.30 de la madrugada”, relató.
“Al otro día lo llamo le pregunto cómo estaba y me dice que mejor, que quería ir a la Federación porque se daba mucha manija. Le digo que lo buscaba 16 y después a las 21 lo podía volver a llevar. A las 21 me llama por teléfono, me dice que por favor vaya que en la federación lo querían matar. Voy, y cuando llego él ya estaba con dos personas del 911 adentro y un compañero. Empezó a decir cosas incoherentes, que una rejilla de 20x20 salían los tipos, o dentro de un horno pizzero, o del desagüe. Para mí, estaba teniendo un problema, un brote psicótico, pero no soy médico. Los policías me dijeron que no lo veían bien y me dijeron que lo lleve al médico. Lo convenzo para llevarlo a su casa, y cuando estábamos saliendo sale un auto de la vereda de frente, pero de casualidad, se pone a la par de nosotros y él dice ahí están me quieren matar. Los mismos policías que nos atendieron iban por la vereda, los hablo y nos acompañen porque él se iba a sentir más segura. Pidieron autorización, se subieron a mi vehículo, y el veía algo y tenía miedo”, continuó.
Gutierrez indicó que en ese momento llevó a Igne a la Comisaría Primera, que continuaba expresando que lo querían matar. “Yo le decía que se calme. Me decía que yo estaba del lado de ellos. Hablo con el oficial, le pido que lo haga pasar adentro para que sienta tranquilo hasta que yo llame a la familia de él. Aceptan los policías, nos hacen pasar, hablo con los hermanos, con la familia, me dicen que no podían ir en ese momento hasta que llego uno de los hermanos y los policías me dijeron que no podían tomarle denuncia en el estado que estaba y la solución era llevarlo Alcaldía o llevarlo al Hospital. Las cosas que decía… no estaba dentro de sus cabales”, dijo.
Al otro día, Igne dejó de atenderle al teléfono y empezó a salir en distintos medios de comunicación denunciando la falta de dinero de la Federación y una persecución hacia él.
Ante la situación, Gutierrez presentó las acciones judiciales necesarias tanto en comisaría como en Fiscalía. “En todo lo que dice, mancha un montón de personas, tesoreros, gente que nada que ver, destruyendo familias. A mi hija le preguntan si soy un mafioso o no”, contó.
“El lunes, tengo todo grabado, él me quería pedir disculpas y levantar la denuncia, pero que quería tener una conversación personal conmigo. Le dije que no, porque ya tocaron la integridad de mis hijos. Ya se les fue de la mano”, dijo.
Gutiérrez sostuvo que la Federación está en un excelente estado contable y reiteró que realizarán una auditoría externa para demostrarlo.
Actualmente, la Federación de Centros Vecinales está integrada por 500 centros vecinales de toda la provincia, de los cuales 220 son de la Capital.
“Yo estoy muy tranquilo. Cuando se toca por sacar una ventaja o una cuestión personal o de dinero, lo que fuese, manchar a una persona innecesariamente sin pruebas, decir que la Federación hizo un telo o prostíbulo es totalmente desubicado porque ahí funciona un pre jardín, una escuela de folclore. Todo el esfuerzo que se puso fue en beneficio siempre de los Centros Vecinales”, finalizó Gutiérrez.
Fuente: Sapo de Otro Pozo – FM Noticias 88.1 MHz
LS
